Gustavo Martini es productor agropecuario, inversor y miembro del Directorio de Seed Matriz. Conversamos con él sobre el rol de la tecnología en el agro, el impacto del encapsulado de semillas, y el camino hacia una adopción masiva de nuestra tecnología. “La tecnología es lo que nos permite evolucionar”, asegura.
Para Gustavo, el mayor aporte está en haber revolucionado la eficiencia productiva. “Para hacer la misma cantidad de kilos de maíz, antes se usaba cinco o seis veces más superficie. Eso te da la dimensión del cambio que logró la tecnología en el agro.”
Pero no todo se trata de volumen. Hoy, el gran desafío está en hacer las cosas bien, con el menor impacto posible. En ese sentido, la tecnología permite optimizar el uso de insumos, reducir desperdicios y preservar el ambiente. “La eficiencia y el cuidado del entorno van de la mano. Y la tecnología es la herramienta que lo hace posible”.
Opina que el corazón del cambio no sólo está en producir más, sino también en producir mejor. Y eso implica intervenir con inteligencia en todos los eslabones del proceso agrícola.
Cuando se trata de hablar de innovación, Martini no duda en señalar los beneficios del encapsulado de semillas, la tecnología insignia de Seed Matriz: “Lo primero que notás en campo es la uniformidad en la implantación. Ese fue el objetivo desde el inicio, y hoy es algo tangible. La cápsula soluciona un problema real: los calibres irregulares de los híbridos de maíz y la dificultad que eso implica para una siembra eficiente, sobre todo en máquinas que no tienen la última tecnología”.
Además, destaca un segundo aspecto que considera aún más transformador: el concepto de “carrier”, que convierte a la cápsula en una plataforma versátil para sumar productos a la semilla: “La Cápsula 2.0 es una oportunidad única para ponerle a la semilla lo que sea que ayude a una mejor implantación: micronutrientes, bioestimulantes, tratamientos contra plagas. Y hacerlo de forma segura, precisa y sin interferir con la germinación”.
Para Gustavo, la primera etapa de la campaña: la implantación, es el momento fundacional, y Seed Matriz hace la diferencia:
“Un cultivo bien implantado es la mitad del partido ganado. Si lográs dejar bien sembrado, uniforme, protegido, ya salís al segundo tiempo ganando 2 a 0. Esa ventaja temprana te cambia toda la campaña”.
Gustavo habla desde la experiencia de haber probado la tecnología en campo. No desde la teoría, sino desde la práctica. “Cuando vas al lote a los 20 días de sembrar y ves que la implantación fue pareja, uniforme, firme… ahí entendés que la cápsula está cumpliendo su función”.
Además, valora el aporte de Seed Matriz en la etapa más sensible de la campaña: “Es el momento en que uno tiene más control. Lo que uno hace bien en la implantación es sobre lo que se construye todo el resto”.
En palabras de Martini, la tecnología de Seed Matriz actúa como una herramienta estratégica para capitalizar mejor la inversión genética, los análisis de suelo y la planificación agronómica. Es el eslabón que asegura que toda esa preparación no se pierda.
El potencial está probado, y el camino hacia una adopción más amplia está en marcha. Según Gustavo, el nombre de Seed Matriz ya suena en el ambiente agropecuario: “Es una empresa que genera atención, que se ve con buenos ojos, que entusiasma. Ahora falta escalar el uso, que más productores vean con sus propios ojos los beneficios”.
Confía en que el productor argentino, históricamente abierto a la tecnología, será receptivo si la solución demuestra resultados claros. “Ya quedó demostrado que encapsular no interfiere en la germinación. Ahora, con los nuevos beneficios que se pueden incorporar dentro de la cápsula, la industria lo va a adoptar. Es como pasó con la biotecnología: cuando vieron que sumaba valor real sin complicar el proceso, se integró a la semilla”.
Según su visión, el futuro pasa por lograr que las empresas semilleras adopten esta solución de origen, integrándola como parte del desarrollo de híbridos y variedades, no como un agregado posterior. Ahí es donde la innovación puede alcanzar todo su potencial.
En un contexto donde la eficiencia, la sostenibilidad y la innovación son más necesarias que nunca, el testimonio de Gustavo Martini refuerza el propósito de Seed Matriz: poner la tecnología en manos del productor, desde el inicio del proceso.
Con esta tecnología , y con una visión de futuro, Seed Matriz no solo propone una herramienta, sino un nuevo estándar para la implantación y el desarrollo de cultivos en Argentina y el mundo. “Esto no es solo una mejora, es una nueva forma de pensar la semilla. Y eso cambia las reglas del juego.”